El amarillo de la genista

Hace tan solo dos semanas, las laderas de las montañas campurrianas lucían de un morado intenso. El brezo había florecido y teñía el paisaje. Ayer, el poeta había pasado por allí..

“…mi cuerpo será camino,

le daré verde a los pinos

y amarillo a la genista…”

…y el paisaje se había cambiado de color para deleite de caminantes y montañeros mientras el viento que campaba a sus anchas por collados y cumbres esparcía aromas de tomillo.
 

Y es que, allá arriba, donde aún quedan algunos neveros, el verano llega con retraso y algunas plantas están en plena explosión primaveral, salvo la genciana que todavía no ha desarrollado el tallo donde brotará su flor.

Visita agradable ya que aún no sofoca el calor y, entre el Pico Cordel, el Iján y el Cueto la Horcada, el reciente deshielo alimenta los arroyos que mantienen la frescura y el verdor de las brañas que aprovecha ya el ganado de la comarca.

Cumbre del Cueto de la Horcada (2.111 mts.)

Alto Campoo, valle del Hijar



 


Braña Vieja con el Pico Cuchillón, Pico Tres Mares
y Cueto de la Horcada desde el Pico Cordel

De regreso al valle, qué mejor que finalizar la jornada con una cerveza y grata tertulia en una vieja cantina con ambiente tranquilo y agradable decoración… "La Joyanca" de Abiada, por ejemplo.

 

Cueto de la Horcada, Pico Iján y Pico Cordel desde el pueblo de Abiada

Fotografias realizadas el 7 de julio de 2012