viernes, 20 de diciembre de 2013

La mágica luz



Ya presagiaban las nieblas mañaneras cómo sería la jornada cuando iniciábamos nuestro pasos desde Bustablado –el de Arredondo, que no el de Cabezón de la Sal- por la ruta de Los Machucos. Poco tiempo después se confirmaba con las brillantes  imágenes otoñales que descubríamos a nuestro paso. Cerca de la Garma del Ciervo, luces y sombras pintaban el paisaje con llamativos  contrastes para después, ya en lo alto, agrandar el horizonte hasta el mar bajo un espectacular cielo azul.











Bajo las estribaciones del Porracolina y rodeados de extensas zonas Kársticas que albergan  innumerables cuevas y complejos subterráneos, nos deleitamos contemplando el Macizo de la Enguinzas y Peña Pelada; descubriendo, mas pequeñitas, Las Tetas de Liérganes y el Pico Levante; la ciudad de Santander y su bahía, semi-oculta tras el macizo de Peña Cabarga; Noja y el Monte Buciero con Santoña y las Marismas a sus pies. Más cerca, las cumbres de Peñas Rocías aún mostraban los restos de las últimas nevadas.





                                   (Pinchar con el ratón en la foto para ver mas grande)




 
Descendemos entre hayas, afloramientos calizos y cabañas ganaderas inmersos en la sombra que proyectan las cumbres con el sol otoñal. De regreso, en el Puerto de Alisas, nos detuvimos a contemplar  nuestra ruta y la mágica luz del atardecer.


















                                       Fotografías realizadas el 14 de diciembre de 2013

2 comentarios:

  1. Tus fotos demuestran que esa zona es mucho más bonita que lo que yo recordaba. ¡Realmente preciosas!

    ResponderEliminar